22 Nov Cómo tratar la incontinencia por problemas de suelo pélvico

Antes de empezar a explicar qué es la incontinencia y qué podemos hacer para tratarla, haremos una introducción a lo que es el suelo pélvico y sus principales causas.

¿Qué es el suelo pélvico?

El suelo pélvico es, básicamente, la musculatura que da apoyo flexible al recto, vejiga y útero-vagina en el caso de la mujer.

Causas de los problemas del suelo pélvico

Las enfermedades que involucran al Suelo Pélvico se originan en el debilitamiento de la musculatura que forma esta región anatómica. Esta afección tiene gran incidencia en mujeres en edad adulta, y es muy considerable su efecto sobre la calidad de vida de quienes la padecen.

Una causa muy extendida es un efecto secundario tras un embarazo y conscuente parto natural. El peso del feto y la presión que ejerce hacia la vegija y la laxitud de la musculatura de la zona, suelen conllevar problemas de incontinencia tras el parto. Estos problemas pueden desaparecer una vez la musculatura retoma el tono o es un problema que puede alargarse en el tiempo y que debe tratarse.

Otras causas que pueden generar problemas de suelo pélvico son:

• Partos múltiples
• Estreñimiento crónico
• Obesidad
• Lesiones de distinto origen

Gráfico de la zona afectada por el suelo pélvico

¿Qué es la incontinencia?

Llamamos incontinencia a la fuga involuntaria de la orina. Este trastorno impacta negativamente en la calidad de vida de las pacientes, a nivel físico y psicológico. Si bien es mucho más frecuente en mujeres en edad adulta, también puede aparecer en mujeres jóvenes.

Vamos a dividir los tipos de incontinencia en tres grandes grupos:

1. Incontinencia urinaria

La incontinencia de la orina es la más común y puede dividirse a su vez en dos tipos:

1.1 Incontinencia de esfuerzo – Que es la que aparece al aumentar la presión intra-abdominal ante la tos, el estornudo, la risa, o ciertos movimientos/esfuerzos físicos como saltar o correr.

1.2 Incontinencia de urgencia –  Cuando la necesidad de orinar es excesivamente imperiosa y tenemos la sensación de no llegar a alcanzar el lavabo. La incontinencia urinaria por urgencia puede producirse por:

• Incontinencia sensitiva: Está provocada por un aumento de los impulsos sensitivos desde los receptores de tensión/presión que se encuentran en las paredes de la vejiga. Aparece una sensación temprana de plenitud y urgencia por orinar. Puede estar asociada a enfermedades.
• Incontinencia motora: La pérdida de orina está motivada por un fallo en la inhibición del reflejo de la micción. Está causada, principalmente, por mecanismos psíquicos, esfuerzos u obstrucción.

Una debilidad en la musculatura o presión hacia la vegija puede resultar en una incontinencia

2. Incontinencia Anal

Este tipo de incontinencia es debido a  sufrir complicaciones en el control de la defecación. Las heces se filtran fuera del recto de manera involuntaria. Esta incontinencia también es más frecuente en mujeres, sobre todo en mujeres en edad adulta.

3. Incontinencia Mixta

Es la combinación de ambos tipos de incontinencia: urinaria y anal. La paciente puede sufrir de pérdida de control intestinal además de micción involuntaria. Las ganas de orinar son repentinas y urgentes, así como las de defecar. Como se explicó anteriormente, esto tiene que ver con el debilitamiento y /o lesión en la musculatura del suelo pélvico.

Gráfico sobre la musculatura del esfínter

Diagnóstico

Una historia clínica completa es esencial para conocer el tipo de incontinencia. Existen cuestionarios para realizar una correcta valoración de la incontinencia urinaria. Será necesaria una exploración física completa, ecografía e incluso puede ser aconsejable un estudio urodinámico para valorar el funcionamiento vesical.

Tratamiento de incontinencia

Las personas que sufren de incontinencia deben controlar el consumo de bebidas para evitar una acumulación excesiva de orina. Es mejor beber más cantidad de líquidos al principio del día y a medida que este avanza, ir disminuyendo su consumo. Como siempre os decimos en Iocir, llevar una vida saludable es básico para ayudar a resolver cualquier problema de salud como por ejemplo, comer una dieta equilibrada, en este caso evitando alimentos diuréticos, rica en fibra para prevenir el estreñimiento. Una dieta que nos permita tener un peso apropiado, ya que la obesidad es uno de los factores que pueden desarrollar una incontinencia.

Incontinencia por debilitación del suelo pélvico

En casos de incontinencia urinaria por debilitación de la musculatura del suelo pélvico, esta puede mejorar de manera importante si se realizan asiduamente unos ejercicios para fortalecer la musculatura de la zona y así, impedir que haya fugas en situación de esfuerzo. Son los ejercicios de Kegel y las abdominales hipopresivas. Veremos próximamente con más detalle estas dos técnicas. Se puede utilizar la electro-estimulación intra-vaginal para reactivar la musculatura de la zona.

Es importante ejercitar los abdominales posteriores con ejercicios hipopresivos

Existe asimismo un tratamiento farmacológico para tratar algunos tipos de incontinencia. Estos fármacos consiguen aliviar los síntomas y que la uretra permanezca cerrada durante el llenado de la vegija.

Y por último, hay casos que requieren de cirugía. Según el tipo de incontinencia, de uretra y de vegija, se aplicará una técnica quirúrgica u otra.

En todo caso, es imprescindible someterse a un estudio para diagnosticar el tipo de incontinencia y poder ofrecer al paciente el mejor tratamiento para su caso.

Por todo ello, os recomendamos que si tenéis problemas de incontinencia por debilitamiento del suelo pélvico u otras causas acudáis a un centro médico como Iocir, donde os podrán hacer un exámen completo y ofreceros un buen diagnóstico.